Introducción a la literatura
- LA LITERATURA
Desde que el hombre existe ha sentido la necesidad de comunicarse, de expresar sus sentimientos, de cultivar su imaginación y lo ha hecho por medio de un don que lo diferencia del resto de los seres vivos: LA PALABRA. Pero la palabra puede utilizarse de distintas maneras:
- unas veces lo principal es transmitir ideas claras y exactas;
- otras se pretende crear belleza, impresionar al receptor a través de un mensaje elaborado especialmente con tal finalidad.
Esto es el lenguaje literario, la forma de expresión propia de la literatura.
En principio, la literatura fue oral, transmitida de boca en boca o representada ante un público. Después, en un proceso muy lento, se hizo escrita a medida que avanzaba el tiempo y progresaba la sociedad. Su desarrollo definitivo se logró con la imprenta, que facilitó la difusión de los libros y el acceso a la lectura de una manera rápida y eficaz. Entonces alcanzó sentido pleno la palabra literatura (del latín LITTERA: letra).
La característica esencial que distingue a la literatura de otras artes es que tiene el lenguaje como materia prima.
LITERATURA. Arte que emplea como instrumento la palabra. Comprende no sólo las producciones poéticas, sino también las obras en que caben elementos estéticos, como las oratorias, históricas y didácticas.
Diccionario de la Real Academia Española.
- LA CREACIÓN LITERARIA
En la comunicación lingüística hay varias funciones, una de ellas es la FUNCIÓN POÉTICA, es la que da origen a la obra literaria. El lenguaje literario obedece a motivaciones estéticas y, por tanto, su OBJETIVO no es informar sobre algo, sino crear algo, esa obra que interese por sí misma.
¿Cómo CREA el autor?
Parte de:
- una REALIDAD OBJETIVA (el mundo exterior)
- su PROPIA INDIVIDUALIDAD (experiencia y carácter personal, de ahí su carácter connotativo)
usa:
y construye:
- OTRA REALIDAD, que es esa obra (poema, novela…)
a La obra literaria es un PRODUCTO VERBAL, lingüístico.
- EL LENGUAJE LITERARIO
El LENGUAJE LITERARIO nace del uso personal que el autor hace de su lengua. El autor selecciona, combina y ordena más como un medio de expresión que de comunicación. Lo importante no es sólo lo que se dice, sino la manera de decirlo. En él se seleccionan las palabras de acuerdo con un código de normas distintas de las del lenguaje común.
- CARACTERÍSTICAS
- Predominio de la función poética: se pretende interesar al receptor en el propio mensaje, en su forma.
- Utilización del valor connotativo de las palabras. A su significado objetivo —aquel con el que aparecen en el diccionario— se le añaden otros de tipo subjetivo, que las hacen más ricas en contenido. Por ejemplo: podemos asociar al a palabra primavera con juventud, optimismo, belleza, etc.
- Empleo de recursos estilísticos o figuras retóricas. Son recursos por los que la lengua adquiere mayor expresividad o se despierta una mayor atención hacia lo que se está diciendo. Ejemplos: metáforas, comparaciones, polisíndeton.
- Es polisémico. Puede ser interpretado de distintas formas, por diferentes personas y en cualquier época.
- CLASIFICACIÓN
Debido a que es un uso personal, sus FORMAS son muchas, aunque podemos clasificarlas atendiendo a:
- CARÁCTER de la obra:
- Desde el punto de vista del ritmo:
- Prosa. Es la manera espontánea de hablar y escribir respetando únicamente las reglas de utilización correcta de la lengua. Puede adoptar cualquier forma de elocución: narración, descripción, diálogo, etc. o combinarlas entre sí.
- Verso. Es un fragmento de discurso separado de otro por una pausa obligatoria. Ha de someterse a unas normas de ritmo, rima y medida, o sólo ritmo.
- Prosa Poética. Es la que emplea con regularidad recursos propios del verso.
- Verso prosaico. Es el verso que apenas utiliza tales recursos.
- Desde el punto de vista de la forma interior:
- Narración (se cuentan acciones)
- Descripción (se muestra el aspecto de personas y cosas)
- Diálogo (se reproducen conversaciones)
- Exposición (se expresan ideas o sentimientos)
- Argumentación (se aducen razones para convencer a los demás de una idea)
Estas formas pueden aparecer combinadas
- GÉNEROS
- LITERATURA—LECTOR—SOCIEDAD
Esa obra literaria nace de la actividad creadora de un AUTOR, pero éste vive en una SOCIEDAD determinada y escribe para un PÚBLICO (¿Qué es un libro que no se lee?)
AUTOR

LECTOR SOCIEDAD
Veamos la relación entre los vértices del triángulo.
- AUTOR LECTOR
En el esquema de la comunicación tenemos estos elementos:
La comunicación literaria lo transformará de la siguiente manera:
Según esto, la obra literaria sólo existirá en tanto en cuanto alguien la lea. Porque el lector no es sólo un contemplador (como el de un cuadro o una estatua), sino que es un nuevo creador de la obra.
La descodificación personal que cada lector hace de esos signos lingüísticos, libera la obra del autor, para afirmarse por ella misma como algo con vida propia capaz de hacer surgir ideas o emociones que quizá el escritor no había previsto.
a Hay que hacer unas PUNTUALIZACIONES:
- El autor escribe para ser leído, por tanto, no emplea fórmulas expresivas tan intrincadas que otro no pueda entender.
- La obra literaria puede tener un significado diferente para cada lector, atendiendo a las circunstancias personales que puedan concurrir en cada uno.
- Podemos distinguir dos tipos de lectores:
- Quien simplemente se evade del mundo circundante, el lector se sumerge en otra realidad que él mismo construye en su imaginación.
- Aquel a quien esto no le basta y hace una lectura crítica, se pregunta: cómo ha sido hecha, cuáles son los temas que aglutinan a la obra…
a LA LECTURA COMO INTERPRETACIÓN. Todo proceso artístico necesita, además de un emisor, un receptor. Recibir la literatura, escucharla o leerla, forma parte del proceso artístico. El receptor juzga el grado de originalidad de los textos, su calidad técnica, su inspiración o sus fines. Lo nuevo le asombra o le repugna; se burla de lo que halla repetido o se entretiene comparando las distintas obras en las que aparece; rechaza los textos complicados o disfruta indagando su sentido; asume nuevos conocimientos e ideas o acepta el deleite que el texto le produce. En resumen, recrea la obra literaria, casi como si fuera el mismo autor.
Vista así, la recepción de la literatura no es en absoluto un acto pasivo. La sonrisa o la carcajada, la emoción o el llanto, el enfado o la ira, la suspensión o el escalofrío son reacciones frecuentes del lector ante un texto, aunque no las únicas. Cuando alguien lee, pone en juego su inteligencia, su sensibilidad, y su visión de la sociedad. Si, además, lo hace forma meditada y consciente, las posibilidades de enriquecimiento personal que ofrece la lectura aumentan de forma considerable.
- AUTOR n SOCIEDAD
- Sociedad Autor
- El autor está inmerso en una época, país, clase social, tradición cultural… y parte de sus experiencias para escribir, ya sea aceptándolo o rechazándolo.
- Su independencia artística e ideológica se puede ver afectada por FACTORES ECONÓMICOS, ya que depende del público (que compra la obra o va al teatro). Para evitar esto suele dedicarse a alguna profesión que le permita vivir. En casi todas las épocas suelen coexistir dos tipos de literatura:
- Literatura MINORITARIA: valorada por grupos reducidos bien preparados intelectualmente y atentos a cualquier arte innovador.
- Literatura de MASAS, aceptada por el gran público, con menos inquietudes intelectuales.
- Autor Sociedad
Las ideas y sentimientos de un autor pueden alcanzar gran poder de sugestión en el lector. Cuanto menos desarrollado esté el espíritu crítico en el lector más fácilmente se puede adherir a esas ideas (serán los jóvenes y los que leen pocos libros).
Actitudes ante problemas humanos, sociales, políticos o religiosos pasan del mundo literario al de la realidad afectando, a veces, a amplios sectores (Descubrimiento de América: California, Amazonas, El Dorado: Libros de Caballería).
De esta interrelación entre autor y sociedad derive la clasificación de la literatura en:
- Literatura comprometida: muestra al lector los problemas del individuo y de la sociedad en que vive, con el fin de buscar soluciones.
- Literatura de evasión: se presenta como escape de la realidad hacia un mundo de ficción, por medio del deleite estético.
- Literatura como documento social
Cualquier obra puede ser fuente de información sobre costumbres, ideología, estructuras sociales, política… de un determinado país o época. Pero la calidad literaria no depende de esto, sino de cómo aparece estructurada formando un mundo propio. Ejemplo: Lazarillo.
- GÉNEROS LITERARIOS
Durante el proceso de creación de una obra literaria, el autor dispone los elementos constitutivos según lo que desea expresar y para ello tiene presente, más o menos conscientemente la tradición literaria al respecto. Por tanto, las obras literarios pueden clasificarse atendiendo a ciertos rasgos de identificación. Estos grupos resultantes reciben el nombre de GÉNEROS LITERARIOS.
Se suele hablar de tres géneros fundamentales:
- LÍRICA
Es una profundización en el propio yo del autor. Se manifiesta lo subjetivo: emociones, sentimientos, reflexiones… Puede haber tres actitudes.
- La expresión de una emoción ante un suceso.
- El hecho que emociona al poeta se le aproxima en un encuentro, se convierte en un tú.
- El poeta expresa sus sentimientos más íntimos.
- NARRATIVA
Se configura un mundo en el que se sitúan acciones humanas. Ese mundo y esas acciones, aunque fruto de la imaginación del autor, se nos muestran como algo independizado, es decir, situado fuera de su autor. Tanto la descripción de objetos como la abundancia de episodios cobran gran importancia.
El lector puede imponer su propio ritmo a la obra, según su estado de ánimo o sus gustos puede detenerse más en un pasaje, volver atrás o pasarlo por alto.
Los elementos estructurales son:
- personajes
- hechos
- espacio
Según la importancia concedida a cada elemento y la forma exterior del relato se pueden diferenciar estos subgéneros:
- epopeya o épica
- novela
- cuento …
- Epopeya
A través de unos personajes, implicados en unos acontecimientos, se recoge la vida, costumbres, creencias y sentimientos de una colectividad, de un pueblo.
¿CUÁNDO? Suele aparecer en los comienzos de la historia literaria de un país.
CARACTERÍSTICAS
- En verso.
- Transmisión oral.
- Hechos pasados.
- El autor contempla los hechos desde fuera.
- Novela
CARACTERÍSTICAS
- Se narra un mundo privado (en la epopeya era un pueblo).
- El público es lector (no un grupo que escucha).
- Los personajes son particulares (no encarnan ideas o sentimientos de un pueblo).
- Se apoya en la realidad conocida, de la cual parte incluso cuando es fantástica.
- En prosa.
- Detallista en las descripciones, ya que es lector y no público oyente, por tanto, cuenta con más atención.
TIPOS
a) Según el predominio de un elemento de la narración:
¤ De acontecimientos:
- Se retiene la atención del espectador por la variedad de lances, incidentes y episodios.
- Personajes y ambientes están supeditados al desarrollo de la peripecia.
- Ejemplos: policíaca, aventuras, ciencia-ficción, sentimental-amorosa.
¤ De personaje:
- Se apoya en el protagonista único para analizar la evolución de un sentimiento o para ahondar en un espíritu situado en conflicto con su contexto situacional.
- Ejemplo: El Quijote.
¤ De espacio:
- Hay gran abundancia de personajes y episodios para mostrar la sociedad de una época.
- Ejemplo: Picaresca y novelas del siglo XIX.
b) Según el punto de vista:
¤ El autor se coloca fuera:
- En 3ª persona.
- Puede haber dos casos:
- Narrador omnisciente:
- Lo sabe todo, conoce todos los acontecimientos en sus más pequeños detalles.
- Hace juicios y comentarios sobre los personajes y hechos narrados.
- Narrador objetivo:
- Se deja actuar a los personajes sin la constante interferencia del narrador.
- Se tiende más a mostrar a los personajes que a hablar de ellos.
- Un caso extremo es la técnica cinematográfica: se limita a presentar al personaje a través del diálogo, de los gestos, de las acciones, como haría una cámara cinematográfica.
¤ El autor se introduce como un personaje más:
- En 1ª persona.
- Puede haber dos casos:
- Relato autobiográfico:
- El narrador se confunde con el personaje central de la novela.
- Tiene gran atención el análisis de los sentimientos y propósitos del protagonista, descuidando la representación de ambientes sociales y la caracterización de los demás personajes.
- Suele presentar la historia de una sola aventura, casi siempre vivida en la juventud y de profundas resonancias en la vida íntima del narrador.
- Todo está subordinado a la visión del narrador.
- Novela personal:
- El narrador cuenta y describe acontecimientos en que ha intervenido, pero de los que no ha sido el protagonista.
- Hay mayor objetividad. El narrador es sólo un testigo.
- Cuento
- Es una narración breve de trama sencilla y lineal.
- Su contenido suele ser un breve episodio, un caso humano interesante, un recuerdo, etc.
- Novela corta
- Se caracteriza por su menor extensión que la novela y esto lleva consigo que el ritmo de la acción sea acelerado y también el tratamiento de los personajes.
- DRAMÁTICA
Exige que unos actores representen unos acontecimientos ante un público en un espacio determinado.
¤ Esto influye en la estructuración de la obra:
- limitación en el número de personajes y hechos,
- el espacio no se describe sino que se ve,
- aunque pueda referirse a cualquier época, a los ojos del espectador se presenta como presente.
¤ El público contempla comunitariamente la representación de la obra. Hay ciertos condicionamientos:
- Mayor o menor acierto en: la puesta en escena y la actuación de los actores.
- Comportamiento del resto de los asistentes.
- Captación de todos los elementos necesarios para poder seguir el proceso de la representación (si hay distracción no se puede volver atrás).
¤ Se puede clasificar según tres puntos de vista:
- Tragedia: La vida es sufrimiento.
- El hombre cae en la lucha por mejorarla.
- Los personajes son la encarnación de una actitud o una idea. Por esto son pocos los personajes.
- La tensión dramática progresa rectamente hacia un clímax doloroso en el que se corta violentamente el conflicto.
- El héroe trágico cae pero su actitud es la que el público acepta.
- Comedia: La vida produce satisfacciones.
- El hombre allana los obstáculos que se oponen a la consecución de sus deseos.
- Hay más personajes y episodios que en la tragedia.
- Una sostenida alegría circula a lo largo de toda la obra.
- Se sabe que siempre hay final feliz.
- La comicidad surge las situaciones y el lenguaje.
- Drama: La vida encierra dolores y alegrías.
- El hombre sufre y se siente feliz, pero es lo doloroso lo que predomina.
- Se aproxima a la vida real.
- Hay más personajes y episodios que en la tragedia.
- Las escenas cómicas alivian la tensión.
- Final suele ser desgraciado.
- Ejemplo; El Caballero de Olmedo.
- OTROS: ENSAYO Y PERIODISMO
Gabriel García Márquez

"Pero en el desorden de la salida lo sintió tan inminente, tan nítido en el tumulto, que un poder irresistible la obligó a mirar por encima del hombro cuando abandonaba el templo por la nave central, y entonces vio a dos palmos de sus ojos los otros ojos de hielo, el rostro lívido, los labioa petrificados por el susto del amor." -El amor en los tiempos del cólera
- Periodista y novelista de Colombia
- "El viento de realismo mágico"
- Premio Nobel recibidor: 1982
Su Vida
Parece que un hombre nacido en la pobreza en Aracataca, Colombia en 1928 y criado por sus abuelos no tendría el buen origen suficiente para tener gran éxito en la vida. Pero no fue el caso de Gabriel García Márquez. Al contrario, García Márquez sacará provecho de la influencia de sus abuelos y la tradición oral de las leyendas caribeñas y llegó a ser un periodista y novelista maravilloso. Como figura sobresaliente del movimiento del realismo mágico en la literatura, García Márquez produjo una colección de obras tan distintas que logró un lugar entre los premiados cuando recibió el Premio Nobel de Literatura en 1982.
Había dos factores importantes que formaron la vida y los pensamientos de García Márquez. El primero es el hecho de que pasó su juventud con sus abuelos en la costa de Colombia, donde pudo experimentar los aspectos de la cultura del Caribe. Con esta cultura, el niño García Márquez escuchó la tradición oral de las historias verdaderas y las leyendas colombianas. La tradición oral ha cambiado de generación en generación porque los narradores siempre añadían u omitían algo que cambiaba la historia. De otra manera, las leyendas que él escuchó además de los cuentos que escribiera tuvieron personajes y temas exagerados. También, en la cultura del Caribe había una mezcla de elementos africanos, españoles, e indígenas en la costa. Este aspecto tropical trajo un elemento de fantasía a la vida de García Márquez. La fantasía, las personajes y temas exagerados mostraron la influencia del realismo mágico no sólo en las leyendas que él escuchó, sino en las novelas que escribiría en el futuro.
Su carrera como periodista fue el segundo factor que ayudó a formar la vida de García Márquez. Después de estudiar leyes y periodismo en la Universidad Nacional de Colombia en Bogotá y la Universidad de Cartagena, empezó a trabajar como periodista en 1948. Durante su carrera, trabajó en diferentes lugares desde Nueva York a Roma y París para «El Espectador», el diario de Bogotá, y también en Cuba para la agencia de «La Prensa». En los años cincuenta García Márquez fracasó en su trabajo y tuvo que ir a la ciudad de México para encontrar trabajo como escritor por cuenta propia. Aprendió mucho en sus viajes como periodista, y el estilo que usa como novelista fue influido por la manera concisa que se encuentra en los periódicos.
García Márquez siguió a Miguel Ángel Asturias no sólo en el mundo del realismo mágico, sino también en sus esfuerzos por dar énfasis global a la literatura latinoaméricana. Vemos este énfasis en la creación del pueblo ficticio de Macondo, que apareció en su primera publicación La hojarasca en 1955. Macondo se repitió en su obra para representa al pueblo de Latinoamérica, como la raza de la novela condenada a cien años de soledad.
Los motivos políticos de García Márquez le hizo un miembro influyente de la alza rápida de la literatura latinoamericana, y a la vez su obra refleja su perspectiva política del continente. García Márquez escribe por, para, y del pueblo, y cuando aceptó el Premio Nobel en 1982, dijo que como autores, “we, the inventors of tales, who will believe anything, feel entitled to believe that it is not yet too late to engage in the creation of the opposite utopia. A new and sweeping utopia of life, where no one will be able to decide for others how they die, where love will prove true and happiness be possible…” (García Márquez, The Solitude of Latin America). Se justifica con los mejores autores latinoamericanos, y por decir esto, muestra la gran influencia que un autor puede tener sobre el pueblo de Latinoamérica.
Su Obra
TEMAS
García Márquez puede ser llamado un gran cuentista porque sabe los temas populares y más convincentes para los lectores e incorporarlos en toda su obra para que los lectores lleguen a ser comprometidos con los personajes y sus acontecimientos. Así, se reconoce la obra de Gabriel García Márquez por sus temas repetidos y agradables, y el hecho de que en gran parte de su obra, García Márquez hace un nexo, o sea, un laberinto entre varios temas que existen dentro del argumento.
Quizás el tema que aparece más en su obra, aunque de formas diferentes, es el tema del amor. Sin duda, el amor es un tópico interesante para los lectores, pero García Márquez tiene la habilidad de crear amores atípicos en sus novelas por medio de dar características anormales a las situaciones y a los personajes que están enamorados. En El amor en los tiempos del cólera y Del amor y otros demonios se destaca el tema del amor, pero se representa el amor con cosas malas y aun grotescas a veces. Parece que Florentino Ariza tiene los síntomas del cólera, y todo el mundo cree que la niña Sierva María está poseida por los demonios, pero en realidad ellos solamente están enamorados de otra persona. En ambas novelas, el amor es contrariado dentro de los límites sociales, como las clases diferentes de Fermina y Florentino y el viejo sacerdote Delaura que ama a la niña poseida. A la vez, Delaura y Sierva María demuestran otro tema repetido del amor entre la persona que confiesa algo y la persona que recibe la confesión. Siempre hay un obstáculo que los personajes tienen que superar para que puedan enamorarse.
El tema del amor contrariado dentro de los limites sociales que a García Márquez le gusta usar también refleja otro tema, un comentario social que aparece siempre en su obra. Comenta las diferencias entre personajes sobre la raza, la cultura, la clase, y la religión, como la crítica del médico Abrenuncio en Del amor y otros demonios porque es portugués y además judío, pues es el diablo. Otro comentario social llega de la influencia de la cultura del Caribe. Esta influencia le lleva a García Márquez a escribir sobre el papel de los esclavos, los negros, y los aspectos de su cultura en relación con otras.
En las descripciones detalladas de las ciudades viejas y los personajes complejos, nos revela el tema de la nostalgia y la decadencia. Los personajes siempre quieren recuperar el pasado de su juventud y amores perdidos, y por eso García Márquez retrata escenas que muestran la decadencia corporal, social, y emocional de las personas y los lugares. Se manifiesta el tema de la nostalgia y la decadencia más en las descripciones de Fermina, el doctor Urbino, y su ciudad después de que todos se hacen muy viejos y quieren volver a los tiempos más tempranos, más limpios, y más felices del pasado.
Los temas de García Márquez se añaden al laberinto de su obra porque se repiten los temas del amor contrariado, la decadencia, y el comentario social en sus libros para crear un nexo entre los personajes, el ambiente, y el lector. Quizás los temas agradables y populares que García Márquez destaca le ayudan a ser tal cuentista fantástico.
PROPÓSITOS
Como figura central del movimiento del realismo mágico, uno de los propósitos más importantes para García Márquez es infundir lo mágico y lo fantástico con elementos realistas para confundir al lector, al narrador, y a los personajes sobre lo que es verdadero y lo que es falso. Trata de convencernos con descripciones específicas y detalles históricos de que la historia que cuenta es verdadera, porque es sencillamente el propósito del realismo mágico, y si un autor no puede hacerlo, no ha logrado desengañar al lector.
A veces García Márquez engaña al lector con el suspenso y la psicología contraria, como en Del amor y otros demonios cuando los personajes que creen que el amor es un demonio tienen más características demónicas que los que piensan que el amor no es una cosa demónica. La estructura compleja de sus novelas y a veces los cuentos pequeños dentro de sus cuentos y los temas intercambiados crean una mezcla de tiempo, lugar, y acción que confunde al lector con el engaño del suspenso y la intratextualidad.
El tema de la nostalgia ayuda a demostrar el propósito de recubrir el pasado y el siglo de oro para los personajes en su obra. Para lograr este propósito, García Márquez muestra como los personajes llegan a ser viejos y decrépitos en ciudades que no funcionan como en el pasado, mientras todos piensan y esperan que estarán en los días de su juventud. Su atención en las descripciones de sus personajes es uno de sus mejores talentos estilísticos.
RASGOS ESTILÍSTICOS
Quizás la razón por la cual García Márquez es tan renombrado con los premiados es su habilidad de contar una historia de ficción como si fuera verdad, y puede hacer esto fácilmente porque los rasgos increíbles de su estilo único le ayudan a crear historias ficticias con detalles específicos y exageraciónes mientras el argumento parece verdadero.
Los detalles específicos que se atribuyen a los personajes parecen tan vivos y verdaderos que el lector puede asociarse con ellos, y sabe sus pensamientos y lo que ellos harían en ciertas situaciones. Las descripciones detalladas y a veces exageradas de los personajes, el ambiente, y la acción ocurren porque son partes del realismo mágico, el aspecto más notable del estilo de García Márquez. Hay cosas que son actuales y realistas mientras que parecen mágicas e imposibles a la vez, como la exageración de los 622 asuntos amorosos que Florentino Ariza tiene mientras salvando su virginidad para su amante verdadera Fermina Daza. Aunque cosas como el cabello de Sierva María que mide veintidos metros, el hielo en Cien años de soledad que parece un diamante grande al hombre, y las mariposas amarillas que siempre siguen a los novios en Cien años de soledad parecen muy extrañas a los lectores, los narradores, y los personajes, porque cuando están infundidas con elementos realísticos todos pueden creer que son verdaderas. García Márquez, “el viento” del realismo mágico, añade hechos innecesarios pero específicos sobre personas y lugares de la época para dar crédito a sus novelas que solamente García Márquez puede tener.
García Márquez cambia entre épocas dentro de una novela para confundir al lector y mostrar la idea del eterno retorno y el tiempo circular. Hay escenas retrospectivas donde la obra empieza con el fin, como en Del amor y otros demonios. Sabemos al principio que la niña ha estado muerta hace casi doscientos años, pero luego nos cuenta de la niña cuando está viva. La estructura de sus novelas junto con el concepto del eterno retorno, las descripciones verosímiles, y la exageración del realismo mágico son algunas de las razones por las que Gabriel García Márquez puede ser llamado un gran cuentista.
Del amor y otros demonios
Se manifiestan los elementos más típicos del estilo, tema, y propósito de García Márquez en su novela fantástica, Del amor y otros demonios, que trata de la niña Sierva María y la cuestión de si ella está poseida por los demonios o no. Después de un mordisco de un perro rabioso, la familia de Sierva María piensa que ella tiene una enfermedad demónica y que necesita un exorcismo, pero el sacerdote designado Cayetano Delaura piensa de otra manera. Delaura piensa que la niña turbada sufre más de sus padres y la decisión de hacer el exorcismo que sufre de la herida en el tobillo izquierdo. Por medio de un comentario social de la familia, una crítica de la iglesia, y la cuestión del amor como demonio, García Márquez nos muestra que las percepciones sobre el amor pueden ser tan diferentes y confundidas que al final, nadie puede entender el sufrimiento verdadero de una niña enamorada de solamente doce años.
Sierva María llega de una familia de clase alta y rica, pero no existe ningun forma de amor entre ella y sus padres ni entre sus padres mismos, el marqués de Casalduero Ygnacio y su esposa segunda Bernarda Cabrera. Por la falta de amor con su esposo el marqués, Bernarda odia a su hija porque ella es un producto de su matrimonio con él. Pues durante su juventud, Sierva María tiene que pasar todos los días con los esclavos de su familia, y ciendo a su criado personal Dominga de Adviento y a otros con quienes aprende música, religión, y la manera de mentir a los dueños. Sierva María llega a ser un producto de la cultura de los esclavos negros, y no de sus padres, pero Dominga de Adviento “que gobernó la casa con puño de fierro hasta la víspera de su muerte, era el enlace entre aquellos dos mundos” (García Márquez, Del amor y otros demonios,18). Sin este enlace, no hay nexo entre la niña y el mundo de sus padres, y ella puede hacerse invisible cuando anda con los esclavos. Por las mentiras que aprende del mundo de los esclavos, la niña confunde a todo el mundo, aun el lector, sobre la cuestión de si ella está poseida o no. García Márquez utiliza esta característica de Sierva María para añadir el elemento de misterio sobre la niña demónica.
Hay otro aspecto del comentario social que se centra más en las diferencias y los prejuicios sociales que afectan a las decisiones sobre el exorcismo. Tiene que ver este comentario con el personaje de Abrenuncio, el médico que examina a Sierva María después que recibir el mordisco del perro rabioso. Él es judío y portugués, y por su origen tiene una larga historia de maldad con que la iglesia y la gente lo asocian con el diablo. Bernarda demuestra estos prejuicios porque “prefería morirse como estaba, sola y desnuda, antes que poner su honra en manos de un judío agazapado” (43). También el caballo de Abrenuncio que muere con cien años no es natural, y por eso parece del diablo. García Márquez empieza su crítica a la iglesia aquí porque sus prejuicios sobre el médico Abrenuncio les hacen abogar por un exorcismo innecesario.
Se ve la actitud que García Márquez tiene sobre la iglesia de esta época por la crítica de las monjas, el arzobispo, el convento, y todo lo que se asocia con la religión cristiana en la novela. Se destaca el conflicto entre la iglesia y el gobierno con el hecho de que el poder y la riqueza de las monjas está creciendo demasiado, y muestra esto con el poder que la iglesia se impone sobre la familia de Sierva María y su exorcismo. El padre de Sierva María teme que su hija tenga un mordisco rabioso, y piensa que es necesario ponerla en un convento para que pueda purificarse. Se describe la parte del convento donde encierra a Sierva María como “un pabellón solitario que durante sesenta y ocho años sirvió de cárcel a la Inquisición, y seguía siéndolo para clarisas descarriadas” (89). La pobrecita tiene que quedar en el espacio reducido de su cuarto que parece a una cárcel, sin cosas cómodas ni mucha luz. La única cosa que alivia su solitud y dolor es la visita del sacerdote Cayetano Delaura, el que debe hacer el exorcismo, pero creo que no es necesario para una niña que solamente sufre de una familia paranoica sin amor.
Las visitas del sacerdote comienzan el amor entre los dos, un amor profundo que crece durante la novela y el tiempo que ella pasa en el convento. Este tema de una relación amorosa entre un sacerdote y alguien que se confiesa a él se repite mucho en la obra de García Márquez. Nadie toma nota del amor creciente entre la niña y el sacerdote porque todos están preocupados por la cuestión del exorcismo. Casi todas las personas en el convento, especialmente las monjas y el arzobispo que temen los poderes demónicos de la niña, parecen paranoicas sobre la traición de su religión. A la vez, por esta crítica de la iglesia, da respeto a la religión de los esclavos, porque no había problemas como estos cuando Sierva María estaba con ellos. Mientras el tiempo pasa cuando Sierva María está en el convento con las monjas locas y el arzobispo obsesionado con el exorcismo, dos cosas siguen ocurriendo: ella parece más y más demónica para los que no la conocen, pero parece más y más inocente, dulce, e ingenua a Delaura, que está enamorada de ella.
Ambos Abrenuncio y Delaura aman a Sierva María, y por eso no creen que necesite un exorcismo. En realidad, Abrenuncio piensa que el exorcismo es un demonio. Quizás el exorcismo es uno de los “otros demonios” del título. Sin duda, hay un demonio que la familia y la iglesia piensan que llega de la rabia, pero García Márquez emplea su técnica del realismo mágico para crear una historia que sugiere muchas posibilidades de los demonios que existen en el mundo de Sierva María. Los demonios son las cosas que la evitan ser feliz, o sea, cosas que provocan su dolor y soledad que finalmente le vuelven loca y causan su muerte. Pueden ser los problemas de su madre Bernarda y su pasado, el exorcismo, o el amor en sí mismo. Estas cosas en realidad no pueden ser demonios, pero con elementos del realismo mágico, aunque nosotros no comprendemos, García Márquez hace ideas imposibles y mágicas como si fueran verosimiles, y tenemos que aceptar la historia. Presenta la posibilidad que no es el amor el que es el demonio, sino que es la falta de amor la que es el demonio. Los que creen que el amor es el demonio son los que tienen características demónicas, pero Sierva María admite a su amiga en el convento, Martina, que “Tengo adentro un diablo” (118). Está diciendo lo que sus padres han declarado, y no sabemos si tiene demonio o no, pero sabemos que está poseida por algo, y probablemente es su amor para Delaura.
García Márquez se centra en la familia cruel de la niña, la iglesia, y el realismo mágico que describe los demonios posibles del título hasta el fin de la novela. Solamente al final nos damos cuenta de que el autor nos ha engañado, porque ahora revela que el amor inmenso entre Sierva María y Delaura es el tema central que no ha mencionado mucho antes. La técnica del suspenso sirve para la cuestión sobre la posesión demónica. En toda la novela, García Márquez nunca contesta abiertamente a esta cuestión de que ella está rabiosa, poseida, o ambos. Sin embargo, logra sus propósitos de exponer los comentarios sobre los métodos conservadores y severos de la iglesia y una familia de clase alta que no tiene el amor que solamente empeora su situación con el tratamiento de los demonios. De una manera muy irónica, García Márquez muestra que las personas sin amor en la vida parecen más demónicas que la niña, acusada de ser poseida, y Delaura, el que se opone al exorcismo, los únicos dos que tienen el amor veradadero. Y después de terminar confundiendo al lector con la cuestión de los demonios, García Márquez presenta una cuestión nueva que combina cosas mágicas con elementos realistas para confundirnos aun más. Concluye la novela con el principio: la guardiana nota que “los troncos de los cabellos le brotaban como burbujas en el cráneo rapado, y se les veía crecer” (201) hasta veintidos metros, cuando su cuerpo es descubierto doscientos años después.